Islas Seychelles
El paraíso del Océano Índico
Seychelles está compuesta por más de 100 islas (en su mayoría deshabitadas). Las colinas cubiertas de granito se elevan desde el océano, cubiertas por un espeso bosque tropical rodeado de playas cubiertas de talco y aguas cerúleas. En resumen, es la encarnación misma de una isla paradisíaca.
Para los viajeros que quieran conectarse con la cultura de las Seychelles, un recorrido por Mahé es un buen comienzo, mientras que aquellos que buscan nada más que sol y arena pueden tomar un ferry a Praslin para pasear por algunas de las mejores playas del mundo. Nada dice más ‘escápate del mundo’ como la isla que el tiempo olvidó, La Digue, con menos de 2.000 habitantes y sus bicis como transporte principal.
Si buscas lujo, basta con subirse a un helicóptero y dirigirse a alguno de los hoteles más exclusivos del mundo, cada uno de los cuales se encuentra en su propia isla privada.
Las aguas cristalinas y poco profundas de las islas hacen que las actividades como el buceo, el snorkel sean bastante comunes, mientras que una rica historia ofrece un puñado de excursiones culturales, en caso de que seas capaz de abandonar la magnífica costa.